Champions League: 0-2: El Real Madrid sigue con dudas, pero acaricia los cuartos
El Real Madrid gana a un flojísimo Schalke en Alemania y pone pie y medio en los cuartos de Champions.
Partido aburrido en el que los blancos siguieron miostrando dudas en su fútbol y falta de intensidad
Cristiano marcó el 0-1 y Marcelo el 0-2, cinco minutos después de que Platte enviara un balón al larguero
Manel Bruña
El Real Madrid, como se esperaba, lo tiene todo de cara para estar en los cuartos de final de la Champions. Ganó, también como estaba previsto, a un flojísimo Schalke 04, pero ni mucho menos recuperó la intensidad, la alegría, el fútbol que demandaba Ancelotti en la previa a sus hombres. El equipo blanco gana a rivales menores por su calidad, pero demuestra que sigue con muchas lagunas en su fútbol que le hace ser un equipo lento, previsible y que está siempre a merced de que un error le suponga que una victoria fácil se complique. Le pasó ante el Deportivo el pasado sábado y en Alemania se repitió la historia. Eso, aunque el Schalke 04 es un equipo que sorprende que esté jugando los octavos de la máxima competición continental.
El conjunto alemán es muy malo y no da la talla para estar codeándose con los grandes de Europa. Con Di Matteo en el banquillo, este equipo está más pensando en defender que en atacar y aunque algunos quisieron venderle como un rival peligroso antes del partido, lo cierto es que a este Schalke 04 no hay por donde cogerle.
Futbolísticamente hablando, el partido fue malo y quizás uno de los más aburridos de toda la historia de la Champions. El Schalke salió con cinco defensas pensando en no encajar otra goleada como el año pasado. El Madrid, con Lucas Silva como titular, se empeñaba en jugar balones largos, lo que facilitaba la tarea defensiva germana que sufría cuando los blancos bajaban el esférico. El control del Madrid era total y el Schalke confiaba en Huntelaar para dar la sorpresa, pero el holandés se lesionó y la noche se le puso aún más negra para los alemanes que ni tan siquiera cambiaron su estrategia con el 0-1 de Cristiano en el minuto 26. El portugués´ volvía a reencontrarse con el gol un mes después y tuvo más ocasiones para marcar, pero se quedaron en eso, ocasiones,
Con ese 0-1 se llegó al descanso de un partido sin historia. El Schalke ni tan siquiera reaccionó en la segunda mitad que continuaba siendo un monólogo del equipo blanco que estaba jugando a placer y fallando en los metros finales. Tan fácil lo veían los de Ancelotti que se relajaron hasta tal punto que permitieron a los alemanes acercarse a Casillas, Fue en el último cuarto de hora del partido cuando el Madrid vio de cerca el fracaso. Sobre todo con un disparo al larguero de Platte en el minuto 74 que dejó helados a todos los madridistas. Esa fue la mejor ocasión de un Schalke que se envalentonó, pero al que le duró la esperanza cinco minutos, el tiempo que tardó Marcelo en poner el 0-2 con un golazo. Ahí sí que se acabó el partido y la eliminatoria, pero lo que siguen son las dudas de este Real Madrid.