Cristiano Ronaldo tiñe de rosa sus diez días más negros
El portugués, muy criticado por su polémica fiesta y por su bajón físico, quiso reivindicarse en Alemania
Un gran pase de Carvajal y una media salida del novato portero germano le permiteron abrir el marcador
Óscar Zárate
Cristiano Ronaldo buscaba una gran noche para acabar con su mini-crisis (tres partidos consecutivos sin marcar), pero lo más destacable de su actuación fue reivindicarse con un gol ante el mediocre Schalke 0-4, obligado a alinear a su tercer portero. El jovencísimo Timon Wellenreuther, de 19 años, 'colaboró' en el 0-1 con una dubitativa salida en el tanto del luso y se tomó la 'revancha' desviando un obús de falta de CR7, aunque más llamativo fue ver cómo su lanzamiento iba dirigido entre los tres palos. Durante su estancia en el Madrid, la mayoría de los golpes francos del portugués se han estrellado contra las barreras rivales o se han perdido por las 'gallineros' de los estadios.
El gol de CR7 tiñe de rosa sus diez días más negros en el Real Madrid. Su inapropiado guateque de cumpleaños horas después del humillante 4-0 encajado en el Vicente Calderón abrió la caja de los truenos y puso en duda la profesionalidad del 'Balón de Oro', protagonista de un decepcionante arranque en este 2015.
Víctima de un manifiesto bajón físico que la prensa filomadridista ha tratado de enmascarar aludiendo a un supuesto problema emocional por su reciente ruptura sentimental con la modelo Irina Shayk, Cristiano dejó en el campo del Schalke buena parte de su depresión futbolística.
El atacante portugués calmó su ansiedad y recuperó sensaciones ante el equipo alemán -se le vio participativo- y muchos, entre ellos Carlo Ancelotti, ya se apresuran en asegurar que "ha vuelto". Sus números ante el Schalke no fueron precisamente épicos: cinco remates (dos de ellos a puerta), 12 balones perdidos y ninguno recuperado. Está claro que su partido no fue tan de color de rosa como podría parecer, aunque su quinto gol en seis partidos de esta Champions abrió el camino del balsámico triunfo de su equipo.
Efusiva celebración del luso
No fue extraño que CR7 celebrase de forma efusiva su tanto, facilitado por una media salida del meta alemán y un gran pase de Carvajal. El portugués colocó sus dos manos abiertas al lado de sus oídos como respuesta a las numerosas críticas escuchadas por su polémico sarao de cumpleñaos y gritó su ya famoso "¡¡¡uuuuuhhhhh!!!", ante una grada que no dejó de pitarle durante la primera media hora de partido.
Cristiano Ronaldo puso fin de esta forma a un mes de sequía goleadora. No marcaba desde su doblete en Getafe, justo el partido anterior a su expulsión en Córdoba por una agresión a Edimar. El domingo le espera otro equipo franjiverde, el Elche.