Porla puerta grande
El Barça merece golear, pero gana por la mínima gracias a un soberbio Hart y hasta pudo sufrir si Ter Stegen, héroe inesperado, no detiene un penalti
Joan Poquí
Un partido que ha podido acabar cuatro o cinco a cero se ha resuelto con un solitario gol de Rakitic, tras asistencia magistral de Messi. Ha sido así por la inspiración de Hart y por el desacierto del tridente barcelonista ante puerta, especialmente de un Neymar injustamente maltratado por la fortuna, incluidos dos postes, del brasileño y el uruguayo. El meta inglés, que en la ida detuvo un penalti a Messi, se ha convertido esta vez en la pesadilla de un Camp Nou que, con todo, se mete en cuartos a lo grande, con una gran actuación. El Barça ha podido golear, pero si Ter Setegn no detiene un penalti con un cuarto de hora por delante, habría sufrido después de perdonar.
Messi ha dirigido las maniobras barcelonistas con otra exhibición de fútbol, con acciones de todo tipo menos el gol. Cuando ha convenido ha dirigido, si no ha driblado tras portentosos cambios de ritmo o túneles a Kolarov y Milner. Incluso, en el tramo final, ha intentado el gol a la contra. Pero incluso en los últimos minutos, con el City a la deseperada, Hart ha evitado goles cantados de Neymar o del propio Leo.
Muy pronto Neymar ha podido avanzar al Barça. Alves le ha habilitado tras recuperar y el delantero azulgrana ha ajustado tanto el balón que ha dado el poste y después se ha paseado por la línea de gol sin acabar de entrar. Es como si esa ocasión malograda condicionase la actuación posterior de Neymar, muy activo al principio y dejando en evidencia Sagna y a Fernandinho, cuando acudía en su ayuda, al que ha obsequiado con un caño al principio del partido.
Messi, en cambio, ha sido todo lo contrario. Dispuesto a sacarse la espina del penalti fallado en la ida en el último minuto, ha sido el motor del conjunto barcelonista y le ha salido casi todo bien. Una combinación primorosa con Iniesta, que ha hecho la pared de tacón, ha acabado con un disparo de Leo rechazado por el meta Hart y dos faltas del crack argentino han salido altas por milímetros..
El enorme trabajo de Messi ha dado por fin sus frutos pasada la media hora de juego, cuando ha recibido tras una contra iniciada por Jordi Alba desde el área azulgrana y ha lanzado un pase desde la derecha que ha encontrado a Rakitic en su subida. El croata ha controlado con gran elegancia con el pecho y ha colocado sutilmente la pelota por encima de Hart.
Mientras el Barça encendía la pasión de la grada con un primer tiempo que pudo acabar 3-0 tranquilamente, el City a penas inquietó a Ter Stegen más que en un disparo lejano de Kolarov. Pellegrini lamenta haberse quedado con diez dos veces ante el Barça. Esta vez tuvo que ser la tercera. Una sucia patada de Nasri por detrás de Neymar mereció ese color. No ha sido el árbitro, el permisivo Rocchi, sino el técnico chileno el que ha dejado a Nasri en la ducha, al reemplezarlo por Navas en el descanso. Incluso Silva, supuestamente propietario de un fútbol de seda, se ha transformado en un vulgar leñero al entrar por detrás a Messi. Amarilla y, encima, protestando.
La patada de Nasri ha acabado de descentrar a Neymar, que ha desperdiciado un nuevo pase de Messi que le había dejado solo. Ha querido dar una asistencia y le ha salido imprecisa. Incluso ha contagiado su mala estrella a Suárez, que ha estrellado un segundo balón en la madera tras un sensacional pase de brasileño.
Con Navas, el City ha competido mejor y ha llegado a generar problemas al Barça. El primer sobresalto, mayúsculo, se produjo al intentar driblar Ter Stegen a Agüero en la derecha de su defensa, después de salir para evitar que un balón saliese a córner. El argentino le ha robado la cartera, pero se ha precipitado al disparara sin portero pero desde lejos y con toda la ventaja para Piqué.
La locura se ha instalado en el partido cuando Navas ha superado a Jordi Alba, ha entrado hasta la pequeña y ha probado el pase de la muerte, pero le ha salido defectuoso. En la contra, Neymar se ha ido con toda la ventaja y ha dado un pase entre líneas a Messi. esta vez ha sido el argentino el que no ha encontrado el gol ante Hart.
Tras haber dejado con vida al City en innumerables ocasiones, ha tocado sufrir. Rocchi, con un deseo mal disimulado de meter a los ingleses en cuartos, ha anulado un gol a Alba por un fuera de juego más que discutible y, en la jugada posterior, ha señalado penalti de Piqué a Agüero. Ter Stegen se ha vestido entonces de héroe y se ha rehabilitado tras su error rechazando el penalti lanzado por el propio Kun. Después, aún ha detenido dos intentos a la desperada del City. Y, hasta el final, Hart se ha empeñado en mantener a los suyos con vida en este inesperado duelo de porteros.