CRÓNICA | 23/08/2014 | ALBERTO NAVARRO
- SUPERCOPA DE ESPAÑA
- FINAL (VUELTA)
- 22/08/2014
ESTADIO VICENTE CALDERÓN
No pudo ser. La falta de puntería penalizó a un Real Madrid que mereció más en esta Supercopa de España. Todo se complicó desde el principio. A los dos minutos se adelantó el Atlético. Moyá sacó en largo, Mandzukic peinó y Griezmann asistió de cabeza al croata, que batió a Casillas a bote pronto desde la frontal. El tanto no modificaba en mayor medida el plan inicial de los madridistas, que seguían teniendo la obligación de marcar. Esta vez para llevar el partido a la prórroga.
Sólo existió el Real Madrid desde ese momento. Los blancos distribuían el esférico rápido y con criterio y creaban peligro a su rival en los espacios desocupados entre las tres trabajadas líneas locales. Modric probó fortuna de volea en el 18’ y James protagonizó las dos siguientes ocasiones. En la primera, el colombiano se plantó en el mano a mano con Moyá tras una pared con Carvajal, pero su disparo se paseó por la línea de gol tras rechazar en el portero local. Su remate de cabeza en la segunda pasó a escasos centímetros de la portería rojiblanca once minutos después.
JAMES ESTUVO MUY ACTIVO EN LA PRIMERA MITAD.
Los blancos seguían llegando con peligro y parecía que Ancelotti había encontrado el camino para romper el férreo sistema defensivo rojiblanco. Los blancos estaban mereciendo, al menos, el empate y Bale lo tuvo en sus botas. El galés recortó a Godín en la frontal y armó rápido el disparo, que no encontró portería en el 39’. No fue la última de la primera mitad. La protagonizó James en el 46’. El remate del colombiano, que estaba haciendo mucho daño entre líneas y fue quizá el jugador más destacado de los blancos, rozó el palo de la portería defendida por Moyá.
Sin suerte de cara a gol
Sin suerte de cara a gol
Ancelotti decidió dar entrada a Cristiano Ronaldo en lugar de Kroos en el descanso. Pese a todo, el Atlético tuvo la primera oportunidad del segundo acto. Koke sacó la falta, Raúl García remato al larguero en el 49’y Casillas estuvo muy rápido al evitar que rematara Mandzukic en boca de gol. Se volvió loco el partido a partir de ese momento y ambos equipos tuvieron posibilidades de marcar. Moyá estuvo acertado en un disparo lejano de Cristiano Ronaldo en el 62’ y Griezmann no encontró portería en un remate cruzado.
El Real Madrid lo intentó hasta el último minuto, pese a que Modric fuese expulsado en el 90’ por doble amarilla, pero la falta de puntería le penalizó en el Vicente Calderón. Los blancos merecieron más. Toca ya pensar en el primer partido de Liga frente al Córdoba.
